Las comunidades de Portobelillo, París y Los Castillos, en el distrito de Parita, han sido históricamente consideradas santuarios naturales para los monos aulladores, una especie de gran valor ecológico para la zona.
Sin embargo, el avance del desarrollo urbano representa amenazas crecientes para su hábitat ya que se ha comprobado que los primates utilizan los cables eléctricos para desplazarse entre las comunidades en busca de alimento.
Esto muchas veces causa que los monos terminen electrocutados y hasta arrollados en las vías, por lo que las autoridades locales buscan estrategias para su protección, entre ellas la colocación de pasos aéreos seguros para su desplazamiento.
Se trata de una estrategia clave para la conservación de esta especie y la mitigación de conflictos con las comunidades locales, en la cual intervienen tanto el Ministerio de Ambiente como la empresa eléctrica, que lograron instalar cinco pasos aéreos de fauna silvestre.
La instalación de estos puentes biológicos busca reducir el riesgo de electrocución de los primates al cruzar cables eléctricos en su búsqueda de alimento, especialmente entre las comunidades de Portobelillo y París, creando un corredor biológico esencial para el intercambio genético entre tropas de monos aulladores, fortaleciendo su supervivencia a largo plazo.
“La implementación de estos pasos aéreos representa una medida concreta que protege a una especie emblemática, al tiempo que promueve la coexistencia armónica con los residentes del área”, destacó Ana Angulo, médico veterinario de MiAMBIENTE.
Angulo añadió que también se contempla un programa de enriquecimiento de bosques de galería para restaurar hábitats y garantizar el acceso natural a fuentes de alimento, disminuyendo la necesidad de que los primates se desplacen hacia zonas habitadas.